La gestión positiva de la Mafia y sus Principios
En principio, a todos les podemos aprender algo, cualquier cosa, incluso a los miembros de la Mafia. Las claves o características que definen a un buen líder funcionan en cualquier medio o mercado, ya seas político, profesor, empresario, gerente de producción, o mafioso.
No he preparado esta entrada para aplaudir a la Mafia o a sus acciones delictivas, la he escrito y grabado con el fin de exponer algunos principios mafiosos que pueden ser aplicados en términos empresariales y de emprendimiento.
A continuación te comparto algunas claves que la Mafia utilizaba para dirigir su organización:
PRIMERA CLAVE.
Tener unos sólidos valores.
Los arraigados valores de estas bandas son apreciables en películas y libros de la Mafia. Muchas compañías también fomentan los valores entre sus filas, algo que con el paso del tiempo las mantiene firmemente unidas.
No existe organización exitosa que no se mantenga unida sin una escala de valores.
Esto es paradójico, porque:
“¿Cómo entendemos que criminales y gente malvada puedan tener valores”.
Algunos miembros de estas bandas hasta se consagran a valores morales. Curiosamente, en la Mafia se pueden encontrar individuos con valores más arraigados a su organización, comparados con miembros de corporativos privados o dependencias públicas que operan «respetando» todas las leyes.
Los mafiosos tienen ciertas normas y creencias que siguen firmemente las cuales los mantienen aglutinados con el fin de lograr su misión.
SEGUNDA CLAVE.
Estrategia y Emprendimiento.
Una de las cosas que encontramos en los líderes de estas bandas criminales es que son grandes negociantes y muy buenos estrategas.
Paralelamente a su negocio principal, los mafiosos mantienen varias actividades lucrativas y negocios legítimos que les ayudan a tapar su principal fuente de ingresos (el crimen organizado).
Cuánto vale tu Idea de Negocio.
Algunas fuentes indican que la palabra Entrepreneur viene del francés que significa «Entrar y tomar», o sea que un emprendedor es alguien que entra y toma, alguien que incursiona en una industria o en un medio y toma algo de beneficio para sí.
La Mafia se siente de alguna forma emprendedora, pero en el sentido criminal.
La Camorra de Nápoles y la tradicional mafia Siciliana que después llegaron a los Estados Unidos, diversificaron su actividad en casi todas las industrias que pudieron, emprendieron donde las dejaron, tenían presencia en casi todos los mercados.
En Nápoles, la Camorra llegó a ostentar tanto poder que casi
estaba convertida en un poder paralelo al gobierno. Su cultura de entrar y tomar estaba tan arraigada en la sociedad que nadie se atrevía a quitarlos, hasta que el Gobierno movilizó al ejército y los depuso.
Lo interesante en cuanto a su estrategia, es el fuerte respeto de sus convicciones, teniendo claras su Visión y su Misión:
Con su visión sabían lo que querían, y no se limitaban en tratar de alcanzarla..
La visión, se refieren a la imagen que la organización o el emprendedor plantea a largo plazo sobre cómo espera que sea su futuro, es como una expectativa ideal de lo que espera que ocurra.
Esta visión puede ser ambiciosa, pero debe ser realista, su función es motivar al grupo para continuar con el trabajo.
La visión de la Mafia era: «Convertirse en el grupo organizado de mayor poder en el país».
En cuanto a la misión, se refieren a tener claro el motivo o la razón de ser de la organización; este motivo se enfoca en el presente, es decir es la actividad que justifica lo que el grupo o un individuo está haciendo en un momento dado.
La misión de la mafia era: «Proveer el mayor número de ganancias a la organización, con especial atención a sus líderes» (hoy mismo).
Ambos conceptos, tanto misión como visión desempeñan un papel psicológicamente importante en la estrategia a largo plazo, sea empresarial, política, personal o criminal.
TERCERA CLAVE.
Una estructura bien organizada.
La Mafia contaba con un organigrama perfectamente estructurado de tipo piramidal. Todos los miembros y a todos los niveles jerárquicos tenían claras sus funciones y responsabilidades.
Entendían claramente sus límites en cuanto a la toma de decisiones.
Todos conocían los gastos que podían hacer, así como la injerencia y el seguimiento que podían ejercer en su individual parcela de autoridad.
Eran muy disciplinados. No transgredían sus propios límites sin antes consultarlo o ser autorizados.
Se conducían con responsabilidad y respetando las jerarquías (aunque suene extraño).
CUARTA CLAVE.
La Ejecución.
Todos los miembros de la Mafia eran buenos para la ejecución, pero no en el sentido de matar a alguien, sino en
la ejecución como capacidad para seguir adelante, de tomar acción y darle el debido cumplimiento a las órdenes que les daban.
Al ejecutar ordenes, los mafiosos estaban cumpliendo primero con un compromiso personal, y luego con lo que mandaba su organización; hacían lo que les mandaban sin cuestionarlo porque era su responsabilidad
Los mafiosos vivían de acuerdo con sus valores, y cuando esos valores se rompían, sabían que tendrían un castigo.
En su caso, los castigos eran definitivos, porque no tendrían más oportunidades para que volvieran a confiar en ellos; eran simplemente eliminados por actuar en contra de sus propios valores, o por no ejecutar debidamente las órdenes que les daban.
Al margen de su actividad delictiva, los miembros de la mafia eran gente con integridad, personas que actuaban como creían, eran conscientes de sus actos a pesar de su violencia.
Su consciencia respetaba sus valores, creían que si traicionaban estos valores, a largo plazo acabarían perdiéndolo todo.
Los mafiosos sostenían que alguien falla en el momento que no respeta o no sigue sus valores.
En la mafia respetaban hasta la muerte sus compromisos, porque esto es una forma de integridad, a tal grado que ni cayendo en la cárcel traicionaban a sus compañeros y menos a sus jefes, incluso cuando la policía les ofrecía colaboración y reducción de condenas.
EL MENSAJE:
Es de destacar su compromiso con los valores, de seguir la misión y la visión, y principalmente de hacer que las cosas pasen, o sea de «EJECUTAR» (no en el sentido de matar, jajá), de tomar acción e ir decidiendo sobre la marcha, pues según ellos, esa es la forma en que se puede llegar a algún sitio.
Entrada y salida musical de Kevin MacLeod de Incompetech.com
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