- Lo que podemos lograr si empujamos una roca, entre otras cosas. Cinco fundamentos básicos para iniciarte en el dominio de un oficio.
- Esta es la historia de un hombre que vivía en un lugar alejado, y una noche mientras dormía, tuvo un sueño. Durante este sueño se le apareció Dios, quien le hizo una petición, le dijo: “Empuja duro contra esa roca”.Este hombre no entendió bien su sueño ni lo que Dios le pidió hasta que a la mañana siguiente, salió de su casa y se encontró con una piedra de un tamaño descomunal, la cual había rodado por la ladera y estaba casi al pié de su casa.Desde ese momento, este hombre empezó a empujar y empujar duro contra la roca, con todas sus fuerzas, pero sin lograr moverla. Durante el día hizo diversos intentos, pero no lograba moverla ni un milímetro. Convencido totalmente de que Dios le había hablado durante ese sueño, convirtió esa tarea en una misión, en «Su Misión», y durante semanas pasaba muchas horas al día empujando la roca, pero esa roca no llegó a ceder en ningún momento.Un comerciante que pasaba por allí, se extrañó al verlo tratando de empujar la roca, y le preguntó: Oye, ¿Qué estás haciendo?.
“Dios me dijo que moviera esta roca”, respondió. El comerciante se echó a reír y le dijo: “Debes de estar equivocado, nunca podrás mover una roca tan grande tu solo”.
De todas formas, este hombre continuó en su intento por mover la roca, sin rendirse. Luego, semanas después, otra persona que viajaba pasando por allí le preguntó: ¿Qué estás haciendo?
“Dios me dijo que moviera esta roca”, le respondió. El viajero le dijo con desdén: ”Yo creo que por pedirte tal cosa tu Dios es medio tonto, mejor ríndete, ¡es imposible moverla!”.
Esa misma noche, este Hombre fatigado física y mentalmente, le dirigió rezos a su Dios: “Dios, he hecho lo que me has pedido, pero esta tarea es imposible, y más bien me parece que te has de estar burlando, toda la gente que pasa por aquí hace mofa de mí por creer que puedo mover esta roca tal como tú me lo pediste”.
Luego, después de un silencio muy tranquilizador, Dios le habló a este hombre y le dirigió estas palabras: “Hijo mío, mira tus fuertes brazos y piernas, y qué poderos músculos has forjado en la espalda, mira el bronceado protector de tu piel. Ve cómo has incrementado tu fuerza y potencia. Admira en lo que te has transformado, ¡Eres un hombre diferente! Yo te pedí que empujaras duro contra esa roca, y es lo que has hecho, Yo nunca te pedí que la movieras”.
- Si a alguna persona se le da el justo y debido valor por sus habilidades y se acepta la razonable probabilidad de que alcance ciertos objetivos dadas esas habilidades, esta persona puede digamos gravitar hacia los dominios donde tenga oportunidades reales de llegar a ser un experto debido a la práctica deliberada y constante.
No existen misterios ni libros de secretos para un excepcional desempeño profesional, solo se trata de dominar los fundamentos del propio trabajo.
- Deportistas de élite, Emprendedores exitosos, Investigadores y Científicos connotados, no pueden hacerlo todo bien, pero todo lo que hacen lo hacen excepcionalmente bien.
- Si eres un líder, un comercial, un Arquitecto o un administrador de fincas, tus fundamentos diferirán. Pero si eres nuevo en tu trabajo, tus fundamentos diferirán de los veteranos en tu empresa. Tal como en las artes marciales, primero debes alcanzar el dominio de los fundamentos básicos de un recién iniciado antes que intentar desempeñarte como un experto.Empieza definiendo estos cinco fundamentos, que según urunurun.com te pueden ayudar a alcanzar la maestría:UNO. Pregúntate: ¿Qué haces repetidamente?DOS. ¿Cómo te comprometes con cada cliente? Y aquí tu cliente puede estar dentro o fuera de tu empresa, dentro puede ser tu jefe o cualquier Ejecutivo que requiera algo de ti.
TRES. ¿Cómo creas valor para otros y para tu organización?
CUATRO. ¿Cómo te recuperas de una situación cuando las cosas no salen como lo planeaste?
CINCO. ¿Qué experiencia y habilidades tienes o podrías tener que otros valoren?
Estos son solo fundamentos básicos, pero cómo llegamos a dominarlos con maestría, pues fácil, con la Práctica.
- Christopher Bergland del psyhchologytoday.com afirma en su publicación “Practica para alcanzar la Maestría” que él cree que todos somos capaces de lograr la grandeza. Dice: “Encuentra algo que ames y trabaja duro para dominarlo. Que no te desmotiven los comentarios que dicen que no empezaste joven a desarrollar tal cosa, no hagas caso de exámenes y tests que arrojan resultados que sugieren que no tienes inteligencia suficiente o que no tienes alguna habilidad natural. El estudio de Neuroplasticity confirma que podemos lograr el dominio de nuevas habilidades a cualquier edad. No todos se convertirán en profesionales de élite, pero las habilidades que aprendas a través de la diaria práctica son transferibles a otras áreas de tu interés a través de toda tu vida.”
Nadie nace sabiendo ni dominando algo naturalmente, y nadie puede ser bueno en todo. Mantente buscando hasta que encuentres algo que ames y entonces practica, practica y practica.
- El mismo Christopher Bergland continúa sugiriendo: “Piérdete en el júbilo del proceso y no esperes recompensa. Llegar a ser realmente bueno haciendo algo es increíblemente importante para la felicidad, la autoestima y la realización. Alcanzar el dominio o maestría en un área específica provee la confianza y la presencia que te servirán para enfrentar otros retos en la vida. El dominio del proceso de maestría te ayudará a maximizar tu potencial humano a lo largo de tu camino.”
- Si quieres que te envíe el texto completo del audio de esta y otras emisiones de este Podcast, solo tienes que ponerte en contacto conmigo y con mucho gusto te lo envío por e-mail.
- En esta ocasión, me despido con una frase del mismo Christopher Bergland.